lunes, 9 de julio de 2012

“Economía verde”


Los manglares de la Península de Yucatán son extremadamente coloridos. Las aguas azul turquesa del Caribe Mexicano, los rosas de muchas aves y los verdes de los manglares, regocijan la vista de cualquier visitante.



Cruzamos a la isla de Holbox en un pequeño catamarán. Ahí nos recibieron pequeños taxis amarillos que nos llevaron a través de las calles del pequeño pueblo, con sus coloridas casa y restaurantes. Nos llovió mucho y apenas pudimos trabajar unos amaneceres y uno que otro atardecer. Pero con tanta biodiversidad y paisajes fue suficiente. Los flamencos, las espátulas, las iguanas, mariposas, una infinita riqueza de especies para enloquecer a cualquiera. Este es uno de los servicios ambientales que prestan los manglares y que no lo entendemos suficientemente. Tener y preservar una gran biodiversidad hace más productivos los ecosistemas que, a fin de cuentas, se traduce en más beneficios para nosotros.

De hecho, los manglares del Caribe lo demuestran perfectamente. Aquí se producen una enorme cantidad de pargos; peces que soportan una de las grandes pesquerías de México. También los robalos, las lisas, las mojarras, son ejemplos de las pesquerías que mantienen miles de trabajos en las costas de México y que se dan gracias a la presencia de manglares.



En 2008 colaboré en un estudio donde estimamos que el valor de los servicios que proveen los manglares a las pesquerías es de miles de dólares por hectárea cada año. Llegamos a esta conclusión a través de una combinación de estudios de campo, análisis geográficos y valoraciones económicas, y encontramos que una hectárea de mangle rojo, el manglar de franja que está directamente en contacto con el mar, mantiene una productividad pesquera anual de unos $37,500 dólares. Además, como parte del “interés” que arroja el capital natural, calculamos que el valor de una hectárea de los bosques de manglar rojo a largo plazo puede ser superior a los $600,000 dólares en un periodo de 30 años (tiempo equivalente a una generación humana).


No cabe duda, hay que cuidar los manglares para mantener los beneficios económicos de muchas comunidades costeras.



1 comentario:

  1. ¡Qué paciencia, y qué traajo documentar
    todo! Maravilloso y felicitaciones

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